Hablar de violencia contra la mujer no se trata solo de agresión física. Se trata de una cultura que todavía está profundamente arraigada en nuestra sociedad, entendiendo que existen diferentes tipos de violencia y que es necesario luchar contra todas ellas. Por eso, hemos preparado un artículo para que sepas todo sobre este tema. ¡Verificar!
¿Qué es la violencia contra la mujer?
En resumen, la violencia es cualquier tipo de agresión contra una mujer. Ya sea físico o no, es cualquier forma de abuso que puede menospreciar, ofender o dañar a una mujer. Según la ONU, la violencia contra la mujer es una pandemia invisible.
Causas de la violencia contra la mujer
Las causas más frecuentes de violencia contra las mujeres están relacionadas con el sexismo y la estructura patriarcal de nuestra sociedad. Los celos, el sentido de propiedad, la necesidad de control y la idea de que la mujer debe satisfacer al hombre pueden ser las principales causas. Comprender las causas y discutir el tema es fundamental para deconstruir estos comportamientos y combatir la violencia.
Tipos de violencia contra la mujer
Pero, después de todo, ¿cuáles son los tipos de violencia contra la mujer? Según la Ley Maria da Penha, que profundizaremos más adelante, la violencia contra la mujer tiene 5 tipos incluidos en los artículos de la ley. Mira cuáles son:
- Violencia física: esta, quizás, es la forma más notoria en la sociedad. Es cuando la mujer es víctima de agresiones físicas, que van desde el agarre de los brazos hasta la tortura.
- Violencia psicológica: es cualquier acto que cause daño psicológico o emocional a la víctima. Aquí se incluyen comportamientos como amenazas, humillaciones, manipulación, aislamiento, vergüenza, chantaje y vigilancia constante.
- violencia sexual: es la conducta de imponer que la mujer observe, realice o participe en una relación sexual no deseada. Cuando hablamos de este tipo de violencia, el término violación es claro, pero puede ir mucho más allá. Los actos más sutiles, como evitar que una mujer utilice métodos anticonceptivos o obligar a su pareja a realizar actos sexuales en el matrimonio, también se consideran violencia sexual.
- Violencia contra la propiedad: es la retención, sustracción, destrucción total o parcial de bienes, valores, documentos o recursos económicos.
- Violencia moral: es el acto de difamar, difamar o injuriar a una mujer.
Como has visto, algunos actos que pueden parecer normales a primera vista también encajan en el concepto de violencia contra la mujer. Por lo tanto, debemos estar siempre pendientes de estos comportamientos a diario, para que se luchen y se castigue al agresor. Cuando se tolera, la violencia tiende a volverse cada vez más abierta y puede terminar en feminicidio.
Cómo combatir la violencia contra la mujer
Además de denunciar, el combate a la violencia contra la mujer debe hacerse a diario y no solo en situaciones extremas. Hay varias actitudes que debemos adoptar como sociedad que marcarán la diferencia. Verificar:
1. Hablar sobre la masculinidad
El concepto de masculinidad tradicional necesita ser discutido y revisado, ya que es una de las causas de la violencia contra la mujer. Situaciones que parecen inofensivas, como decir que un hombre no llora o que el rosa es el color de la mujer, pueden contribuir al mantenimiento de una sociedad sexista. Por tanto, es fundamental revisar estos conceptos que contribuyen a la masculinidad tóxica.
2. Abolir las expresiones machistas
Una de las actitudes que podemos adoptar en nuestra rutina es la de abolir las expresiones sexistas. Muchos de ellos refuerzan la cosificación del cuerpo femenino y contribuyen a la violencia contra la mujer.
3. Desapruebo los chistes machistas
Además, debemos desaprobar los chistes machistas. Mientras los escuchamos, debemos reprender, tomar una posición y explicar por qué esta broma no es aceptable o graciosa.
4. Escuche a otras mujeres
Uno de los puntos importantes es escuchar a otras mujeres. Muchas mujeres viven situaciones de violencia en el hogar o en el trabajo y no tienen idea de que esto está sucediendo. Sin embargo, al hablar y escuchar a otras mujeres, podemos ayudarlas a identificar conductas problemáticas.
5. Fomentar el liderazgo de las mujeres
Una de las formas de contribuir a poner fin a la violencia contra la mujer es alentar a las mujeres a ser líderes. Es una forma de darle voz al género.
6. Paridad salarial
La paridad salarial es una forma de reducir las diferencias de género. Permite a las mujeres ser dueñas de su propio dinero y poder tener el mismo protagonismo que los hombres en el mercado laboral.
7. No juzgues a otras mujeres
Esta actitud es muy importante para nosotras las mujeres para poder luchar contra la violencia. Cuando juzgamos a otras mujeres por su vestimenta y forma de bailar, por ejemplo, estamos contribuyendo a una sociedad cada vez más patriarcal, que coloca a la mujer como un objeto que debe ser moldeado para no desviarse de los estándares machistas.
8. Nunca culpes a la víctima
Una de las formas de combatir esta violencia es olvidar de una vez por todas la culpa de la víctima: ¡nunca es culpa de la víctima! Al pensar de otra manera, estamos legitimando la violencia contra las mujeres y encontrando justificaciones para aliviar la culpa del perpetrador.
Aunque suene fácil, combatir la violencia contra la mujer es un proceso que requiere de deconstrucción diaria, ruptura de patrones y mucha lucha. ¡Estamos en esto juntos!
La ley Maria da Penha
La Ley Maria da Penha tipifica como delito toda violencia doméstica e intrafamiliar. Estos delitos deben ser investigados y juzgados, sin la aplicación de sanciones pecuniarias al agresor. Además, la ley tipifica la violencia doméstica, como se explicó un poco más arriba.
La ley fue promulgada en 2006 y lleva el nombre de una mujer que ha dedicado su vida a luchar contra la violencia doméstica y cuyo esposo ha intentado asesinarla dos veces. Después de muchas discusiones, foros y artículos, la ley fue aprobada y sigue vigente hasta el día de hoy.
Finalmente, si está experimentando alguna de las situaciones anteriores, no se quede callado y consulte a un abogado para que lo oriente. Si conoce a alguien que está sufriendo violencia, escuche, hable y oriente. Aprovecha para conocer más sobre el sexismo y sus consecuencias en la sociedad.